Publicado en El Periódico el día 30/05/2021.

Entrevista en colaboración con BBVA

 

Menza Soluciones Ambientales se dedica al reciclaje y la valorización del plástico usado para reconvertirlo en materia prima, ahorrando recursos.

Su gerente, Virgina Masegosa, explica que los dos últimos años han reciclado una media de 500 a 600 toneladas al mes, con el ahorro de recursos que eso implica.

Los residuos plásticos representan uno de los grandes problemas medioambientales del planeta. ¿Parte de la solución pasa por su reciclaje y reconversión en nueva materia prima?

-Desde mi punto de vista puedo asegurar que sí, ya que hoy en día creo que nadie se puede atrever a decir que la mejor solución pasa por no fabricar plásticos. Está claro que el beneficio que nos han proporcionado en nuestras vidas y en todos los sectores económicos (agrícola, pesquero, médico, alimentación, construcción, eléctrico…) es muy importante, pero a la vez hemos de tomar conciencia que todos esos avances tienen un precio llamado generación de residuos, y que por tanto hemos de ser responsables y trabajar para que los impactos ambientales derivados sean los mínimos.

En esta línea, creo por tanto, que el reciclaje de los residuos plásticos es una solución necesaria ya que reduce directamente las necesidades de materia prima, con el consecuente ahorro de energía y de recursos. No obstante, pienso también que para que éste pueda funcionar, es necesario que todos los agentes que en algún momento interceden en el ciclo de vida de un plástico (fabricantes, administraciones públicas, entidades colaboradoras, recicladores..) colaboren con el objetivo común de minimizar la fabricación de aquellos productos plásticos no necesarios, hacer plásticos que luego se puedan reciclar, y apostar seriamente por la opción del reciclaje a nivel de políticas que lo fomenten.

-¿Cuál es el proceso que sigue Menza Soluciones Ambientales para la valorización del plástico usado?

-En la actualidad, Menza lleva a cabo en sus instalaciones un proceso mecánico en línea, que nos permite en una primera instancia hacer una preclasificación y separación de los impropios de mayor tamaño y metales, para luego proceder al desgarrado, trituración y lavado de los residuos plásticos, garantizando así la eliminación de cualquier impropio que pudiera contener u otro tipo de plástico diferente al que se quiere recuperar.

El producto plástico generado lo ensacamos en ‘bigbags’ de unos 2 metros de altura y después de pasar el proceso de verificación de calidad y de etiquetado, lo almacenamos hasta que finamente es expedido para empresas fabricantes de piezas de plástico y/o otras empresas del sector.

-¿Qué tipo de plásticos reciclan? ¿Son tanto domésticos como industriales?

-Si bien la línea de proceso admite ambos tipos de residuos, a día de hoy estamos más centrados en la valorización de los plásticos postindustriales procedentes principalmente de industrias alimentarias, de la automoción o de la inyección de plásticos. Así mismo, Menza cuenta con una línea importante de trabajo enfocada a la valorización de la fracción plástica generada por las empresas de reciclaje de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE’s) y por la que actualmente estamos apostando con la implantación de una nueva línea de procesos.

-¿Qué volumen de plásticos han reciclado hasta el momento y qué ahorro medioambiental ha significado?

-A lo largo de estos 2 últimos años, Menza ha venido reciclando en torno a unas 500-600 toneladas mensuales de residuos plásticos que ha suministrado directamente a empresas fabricantes de productos, tanto de ámbito nacional como internacional, y la idea es de aumentar esta cantidad en 150-200 toneladas más con la puesta en marcha de nueva línea de proceso.

Se podría decir así, que el ahorro medioambiental, ha sido directamente proporcional al volumen de material procesado, ya que ha sido menos material virgen que han consumido dichas empresas de inyección.

-La empresa nace como un proyecto personal tras años de experiencia en el sector del reciclaje. ¿Qué aporta que no existiera antes?

-La mayor aportación que hasta la fecha hemos aportado (tanto mi equipo de trabajo como yo) ha sido la implicación a todos los niveles para que tengan una gestión correcta de sus residuos, estando localizables en cualquier momento del día. En este sentido, hemos creado en la web una nueva plataforma documental que garantiza la trazabilidad de todos los movimientos, nos hemos adaptado logísticamente a cualquier tipo de recogida de residuos y buscamos solución a todas las problemáticas que puedan tener con los residuos que generen. A nivel de proceso tecnológico, esperamos también en breve, poder contar con una línea nueva de tratamiento que permita valorizar residuos que actualmente tienen difícil recuperación.

-¿Qué evolución ha tenido la empresa y que apoyo han recibido de BBVA?

-La evolución a mi parecer ha sido de 10, ya que fue creada apenas hace 3 años con el capital mínimo que marca la ley y a día de hoy se podría decir que tiene una solvencia económica y una expansión territorial gratamente demostrable. No es fácil establecer una empresa de gestión de residuos partiendo de la nada, porque los costes económicos derivados de cualquier tipo de maquinaria implantada, así como los de la legalización de la actividad y adaptación a las normativas ambientales son muy elevados, por lo que soy completamente consciente que sin la ayuda del BBVA no habría sido posible la continuidad.

He de agradecer muchísimo, toda la colaboración y asesoramiento que he recibido siempre por parte del equipo del BBVA en la negociación de las financiaciones, leasings, y comisiones de movimientos nacionales e internacionales. En este sentido, creo que Menza ha tenido la gran suerte de encontrarse con un gran equipo de trabajo.

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